Invasión de Rusia a Ucrania y la complejidad de las relaciones #nuestro judaísmo#

Invasión de Rusia a Ucrania y la complejidad de las relaciones

Dir. Mauricio Zieleniec

Es un dolor hablar de Ucrania en un momento tan difícil para el mundo.

Antes de comenzar con el tema, algo que quiero decir que es muy importante, muy complejo y es que Ucrania hace 31 años es un estado independiente, tenemos que dejar claro que lo que hay es una invasión rusa a un estado independiente. Es inconcebible. Si mañana me simpatiza o no Cuba y Estados Unidos la invade, yo estaría en desacuerdo. Lo mismo en Venezuela…

En este caso creo que deberíamos condenarla con total claridad a pesar de las complicaciones. 

Por otra parte, como judio, en Ucrania se hicieron dos grandes pogroms. Estaba recordando una javera que esto ya acontecido hace más de un siglo es un dolor es muy grande puesto se asesinó enormemente a miles de judios simplemente por ser judios. 

Tengo a mi abuela que me decia que no habia lugar más antisemita en el mundo que Ucrania. Entonces, ahora al hablar de Ucrania me encuentro en una contradicción. Lo que pasa ahora donde la defiendo y la historia de Ucrania que no me agrada. 

Corroborando datos actuales de la zona, tiene una actitud antisemita y racista del 18% y por cierto, es el menor de toda la región. Como podemos observar, hubo una gran disminución en lo que ha sido la adversidad del judaísmo en Ucrania. 

Está presente el recuerdo doloroso de Babi Yar, en la poesía de Yevgueni Yevtushenko que recordo y denunció la matanza de judios en el nazismo, donde la Gran Guerra Patria  de la URSS que recordaba solo sus héroes. Reprochando al P.C.la misma decía: 

 

No existe monumento en Babi Yar;

sólo la agria ladera. Y tengo miedo.

Hoy me siento un judío en el desierto

que de Egipto escapó. Me crucifican

y mis manos conservan los estigmas.

Me parece ser Dreyfus, condenado,

al que juzgan, escupen, encarcelan;

pero de pie resiste la calumnia

y el grito filisteo. Con la punta

de sus sombrillas en mi rostro vejan

mi indefensión mujeres que se acercan

con vestidos de encaje de Bruselas.

O también soy un niño en Bielostok.

De pronto estalla el pogromo.

La sangre derramada cubre el suelo.

Los que huelen a vodka y a cebolla

salen de la taberna y gritan todos:

“Mata judíos: salvarás a Rusia”.

Un tendero se ensaña con mi madre.

Otro hombre me patea. En vano rezo

plegarias que se pierden en la nada.

Me siento dentro

de la piel de Anna Frank que es transparente

como un ramo de abril.

No hacen falta palabras. Siento amor

y sólo necesito que uno a otra

nos miremos de frente.

Separados del cielo y el follaje.

Solamente podemos abrazarnos

en este cuarto a oscuras.

Quiero besarte una vez más, acércate.

Ya vienen. Nada temas: el rumor

es de la primavera que se anuncia

y del témpano roto en el deshielo.

Y en torno a Babi Yar suena la hierba

que ha crecido salvaje desde entonces.

Los árboles nos juzgan. Todo grita

pero el grito está hecho de silencio.

Al descubrirme observo mi cabello.

También ha encanecido. También grito

por los miles de muertos inocentes

masacrados aquí. En cada anciano

y en cada niño al que mataron muero.

Pueblo ruso, mi pueblo: te conozco.

Tú no odias ni razas ni naciones.

Manos viles trataron de infamarte

al usurpar tu nombre y al llamarse

“Unión del Pueblo Ruso”.** No perdono.

Que La Internacional llene los aires

cuando el último

antisemita yazga bajo la tierra.

No soy judío. Como si lo fuera,

me odian todos aquéllos.

Por su odio

soy y seré un verdadero ruso.

 

Es donde mataron cuarenta mil judios los nazis, enterrados en una fosa común.

La gran guerra patria soviética, en su momento, era tan nacionalista que se olvidaron de poner un monumento. Allí fue donde realizó la poesía que invadió al mundo. 

 

Por eso mismo, es contradictorio para un judío defender a Ucrania. donde sucedió.

 Incluso el mismo presidente ucraniano es hoy judio, el cual reconoce su identidad y recuerda que sus abuelos fueron asesinados en campos de concentración nazi. Además, ha frecuentado símbolos propios de la identidad judía y aunque está algo alejado, no me cabe duda, que reconoce la su identidad ucraniana y a la vez la judía. 

 

Ucrania está ubicado en un lugar casi, en el ex camino de la seda, lugar necesario para poder pasar de Asia a Europa por eso, geográficamente, es una zona que siempre fue compleja.

 

Remontando al siglo IX se formó un reino llamado Rus Kiev que fue la unión de polacos, rusos, ucranianos, austríacos, romanos y algunos grupos más que existió hasta el siglo XIII. 

Cuando Vladímir Putin, los nombra como hermanos se está refiriendo a pueblos eslavos que estuvieron unidos durante muchos siglos atrás. 

A posterior, existe toda una realidad o historia que involucra una permanente guerra y abusos entre todos estos pueblos antes mencionados. 

Por tanto, el origen de Ucrania se remonta al 882 de lo cual no vamos a hacer el relato por la lejanía en el tiempo. 

 

Haciendo un salto en la historia, debemos recordar que luego de la Revolución Rusa ocurrida en 1917, Ucrania pasa a formar parte de la unidad o caparazón de repúblicas socialistas, más específicamente, de la URSS- Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. 

En su estancia, los soviéticos le quitaron una muy buena parte de territorio a Polonia otorgándole a la República Ucraniana Socialista. Estamos hablando, no de ese hecho singular sino de un ejemplo de lo que ha pasado en la región en el siglo anterior. 

 

Ucrania siempre reclamó Crimea, que había sido tomado por Rusia, debido a su punto estratégico: militar, naval y comercial con salida al Mar Mediterráneo. 

Sin embargo, en el año 1954 Jruschov le  devuelve Crimea a Ucrania. 

Alrededor de cuarenta años más tarde, en 1991, cae la URSS y las Repúblicas Soviéticas se desprenden mayormente adquiriendo una independencia fuera de la coraza socialista.  

Leonid Kravchuk, fue el primer presidente ucraniano luego del derrumbe, pro-ruso, donde en forma increíble la ideología ya no tenía importancia y si los cargos y el poder.

 

En 2014 retorna el problema con Crimea. Rusia, con un referéndum muy cuestionado, donde militarmente le convenía, toma Crimea a pesar que el Grupo internacional de los Ocho lanzó sanciones adversas a Rusia. 

 

Paralelamente, debemos recordar años atrás,que las reformas agrícolas de Stalin producidas casi un siglo atrás, trajeron una hambruna terrible tanto para Rusia como para Ucrania; justo donde están las tierras negras que se caracterizan por ser las más productivas del mundo. Allí ocurrió el “holodomor”, cerca de cinco millones de ucranianos mueren por falta de alimento, siendo tan preocupante que llegó a existir un grado de canibalismo entre ellos debido a la desesperación. Concluyendo entonces que la Reforma Agraria socalista fue un fracaso terrible tanto en Rusia como en Ucrania. 

 

Ese vacío Stalin lo llenó de población rusa que es la que hoy en día, al estar en Ucrania, se sigue sintiendo rusa. Generando a posterior, una reminiscencia cultural e idiomática hereditaria de Rusia en dicha zona. 

Esa zona ucraniana con parte de su población de identidad Rusa, llamada Donbass tuvo dos intentos separatistas y autónomos cuya zonas fueron llamadas Donetsk y Luhansk, que intentaron hacerse independientes generando un enfrentamiento con Ucrania que quería mantener su nación unida. Dejando en los enfrentamientos catorce mil muertos en los cuales ninguna de las fuerzas involucradas tiene santidad. A su vez generó un desplazamiento de un millón y medio de personas debido a los enfrentamientos ocurridos. 

 

Si bien, el idioma oficial es el ucraniano, en dichas zonas se hizo todos los intentos para que se siga  la lengua rusa. 

 

 Fue en el momento de la caída del muro de Berlín que Rusia trazó una línea roja en relación a la OTAN y estos nuevos países independientes. Sin la menor duda, el deseo imperialista muestra que más que defender ideologías como la socialista, se estaba defendiendo un poder imperialista. Cae la ideología pero no el deseo de poder.

 

Las razones económicas son el gasoducto que pasa por Ucrania, que le deja por lo menos dos mil millones de dólares al año más las tierras negras que son las mejores a nivel mundial. 

Podríamos decir que frente a la hambruna y el descrédito económico, la inmensa mayoría de los ucranianos están mirando a occidente como el mejor medio de subsistencia alejándose de esa forma de Rusia. 

 

Había quedado un pequeñísimo grupo que se gestó en la hambruna de la Reforma Agraria, años atrás y  su odio a la Unión Soviética los hizo luchar junto a las fuerzas nazis. Dicho grupo existe lamentablemente mínimamente dentro de Ucrania y su presidente optó que, por su naturaleza, se vayan disolviendo solos; pero más que un carácter nazi tienen un carácter anti-soviético debido al “holodomor”. 

 

El concepto de nazismo es condenable pero diferente al nuestro, 

El 90% de la población tiene deseos de ser parte de Europa occidental luego de aquellos los fracasos del Soviet. 

 

Llama la atención que antes la OTAN se suponía que era occidental y capitalista y Rusia era ideologicamente socialista, pero ese esquema de la Guerra Fría queda quebrado cuando son dos potencias capitalistas que se pelean hoy por el poder y no por una ideología. Cabe la pregunta: ¿anteriormente la pelea era por una ideología o por el poder disfrazado de distintos colores? 

 

Ahora bien, podemos buscar la fundamentación antropológica para comprender las fuerzas que están en juego…

Retrotrayéndose, a Dawin, el Homo Sapiens ya peleaba -igual que los mamíferos- por el deseo de poder, de jerarquía, de posicionamiento y espacio. 

El Homo, que evoluciona de los mamíferos y el propio Sapiens, guarda la misma característica evolutiva del deseo de poder, la posesión y el liderazgo de la escala zoológica. 

Respecto a la idea socialista, el filósofo Walter Benjamín reflexiona de su marxismo que no guardaba una evolución antropológica del hombre sino que se manifestaba como una teología de deseos y así conceptuó la idea socialista. 

 

Debemos reflexionar que si bien los valores humanistas pueden ser valorados, no podemos ir contra una realidad natural o antropológica propia de nuestros Sapiens. 

 

Recordemos que alrededor de cinco o seis mil años atrás, antes de cristo, con la Revolución Agrícola se fueron formando pequeñas congregaciones o aldeas que se unieron a lo largo de los tiempos por necesidad de defenderse y allí comenzó la propiedad privada y la puja de los imperios que llegan hasta el día de hoy. Simplemente, podemos recordar que los primeros imperios se constituyeron en la zona de Mesopotamia, donde se alojan los ríos Eufrates y Tigres con los Sumerios, luego los Arcadios, siguiendo los }Babilonios pasando por Egipto, Asiria, etc. 

Desde ese momento histórico, a posterior de la reforma agrícola, el mundo fue plagado de imperios en todo alrededor de su prehistoria e historia.

 

Cuando me pregunto: ¿por qué Rusia está tan interesado en Ucrania? Entiendo que es un poder imperialista que por largos ciclos rodeó permanentemente la prehistoria y la historia de nuestros Sapiens. Las ideologías y los poemas ocuparon un lugar desgraciadamente místico. 

 

Es por esto mismo que la autonomía de una nación, se cae por los intereses imperiales que nos rodean, siendo el caso de Ucrania y Rusia un claro ejemplo del mismo. 

 

Leyendo algo de Aristóteles que decía que el ideal del hombre es el punto medio, la felicidad… me pregunto: ¿no será el poder, la posesión, el dinero, el deseo del hombre?  ¿Más que la felicidad? ¿O la felicidad puede ser eso? Esta situación en la región, me deja pensando si Ucrania puede ser reflejo de que es conflicto del Hombre puesto no son potencias contrarias como podría serlo por ejemplo con el socialismo… Rusia en este caso supongo, solamente está buscando poder. 

 

Tenemos que reconocer la existencia de cuatro grandes imperios en la actualidad: el americano, el ruso, el chino -que sin violencia está acaparando el mundo- y el virtual -financiero tecnológico. 

 

Ese es el gran desafío de analizar nuestra dialéctica.

 

Mauricio  Zieleniec, Director del M. Identidad

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